Niños Índigo
El término niños índigo es utilizado en el contexto de la llamada "Corriente de la Nueva Era" o New Age para referirse a aquellos niños que supuestamente representarían un estado superior de la evolución humana. Quienes defienden esta hipótesis señalan dicha evolución como un avance espiritual, ético y mental, sin atender a la definición que diera el científico Charles Darwin (variación y selección por supervivencia del más apto).
Fuera de la New Age, este fenómeno es considerado un mito pseudocientífico, porque carece de evidencia científica aceptable. La creencia en la existencia de niños índigo se asocia habitualmente a reacciones paternales que surgen frente a la pedagogía y psiquiatría modernas. Una de las causas observadas más frecuentemente, es el pánico moral que surge en los padres al tener que enfrentar una terapia psiquiátrica medicada para sus niños. También el detonante podría derivarse del rechazo a diagnósticos de psicopatologías polémicas o de nuevo cuño, cuando éstas son adjudicadas a los hijos; especialmente de casos como la hiperactividad, el autismo y el síndrome de déficit atencional.
Según sea la corriente a que adhieran los creyentes en la New Age, así serán los atributos y la naturaleza que se describe de los niños índigo. Hay quienes sostienen que estos niños poseerían habilidades paranormales tales como la telepatía o la capacidad de leer la mente, mientras que los más moderados afirman que lo que diferencia a un niño índigo de uno que no lo es son rasgos más convencionales, como una mayor capacidad de empatía o una creatividad incrementada. El término "índigo" referido cromáticamente, surge de la creencia de que estos niños tendrían un aura que sería del mencionado tono de azul.
En el último tercio del siglo XX se crearon escuelas para la formación de estos niños de aura azulada, que según las teorías teofísicas debían liderar el cambio a la era espiritual de Acuario, como dice la canción "Age of Aquarius-Let the sunshine" de The Fifth Dimension. La novela "Niños rociando gato con gasolina" del escritor español Alberto Torres Blandina trata el tema de la vida en una de estas escuelas para niños índigos.
Orígenes
El término compuesto "niños índigo", se origina en el libro del año 1982 "Understanding Your Life Through Color" (Comprendiendo tu vida a través del color) de Nancy Ann Tappe, una autoproclamada psíquica y sinestésica que afirma poseer la habilidad de percibir el aura de las personas. Según sus escritos, comenzó a notar que muchos niños estaban naciendo con auras de color índigo hacia finales de la década de 1970. A principios del siglo XXI, Tappe afirma que el 97% de los niños menores de diez años y el 70% de los que tienen entre 15 y 25 son "índigo". Sin embargo, ningún estudio científico ha conseguido comprobar sus dichos.
La idea de los niños índigo fue más tarde popularizada por el libro de 1998 "The Indigo Children: The New Kids Have Arrived (Los niños índigo: los nuevos chicos han llegado)", escrito por el matrimonio y equipo formado por Lee Carroll y Jan Tober. Carroll insiste en que el concepto se obtuvo a través de las conversaciones telepáticas con un extraterrestre o "energía maestra angelical" a la que él denomina Kryon.
Características
Según los creyentes del movimiento "Nueva Era", los niños índigo poseen característicastales como una mayor intuición, espontaneidad, rechazo a una moralidad estricta y una gran imaginación, añadiéndose frecuentemente también a tales capacidades ciertos dones paranormales, o poderes sobrenaturales como la telequinesis, la clarividencia, la piroquinesis o la capacidad de sanación.
También afirman sus creyentes que estos niños poseen un fuerte sentimiento para generar una diferencia significativa en el mundo, y se encuentran naturalmente inclinados a temas relacionados con la espiritualidad, el ocultismo y el esoterismo. Sin embargo estas afirmaciones quedan en el plano de lo hipotético, debido a que no han sido demostradas científicamente. Aun así existen místicos que dicen haber trabajado con niños de aura azul (índigos), asegurando que sus características son reales y existen variaciones de estas entre un niño y otro.
La psiquiatría y la psicología han desestimado la existencia de estos niños, dado que no se ha podido demostrar su existencia. Expertos psiquiatras afirman que la New Age, debería producir evidencia empírica acerca de este supuesto tipo de niños.
El psiquiatra pediátrico Russell Barkley, sostiene que los diecisiete rasgos más comúnmente atribuidos a los niños índigo, son tan vagos que "podrían describir a la mayoría de la gente la mayor parte del tiempo", y refiere además que podríamos estar ante un fenómeno psicológico conocido como "Efecto Forer". Se ha indicado también que etiquetar a un niño revoltoso como "índigo" retrasa el diagnóstico y el tratamiento que pudieran ayudarlo.
Algunos pedagogos y psiquiatras han señalado que la creciente ineptitud de los sistemas educativos para tratar la agresividad de algunos niños y niñas, podría haber forzado a algunos padres de niños diagnosticados como "hiperactivos", a acudir a los proponentes de estas teorías pseudocientíficas. Los padres de estos niños recibirían de ellas la atención y escucha que les serían negadas en las instituciones educativas y sanitarias.
De este modo, pedagogos y profesionales de la mente afirman que la defensa de la supuesta existencia de los niños índigo es en realidad una reacción de "rebeldía" de los padres hacia sistemas educativos autoritarios que restringen las conductas expansivas del infante, que premian la pasividad y el conformismo, y que fustigan la creatividad.
Los más escépticos opinan que esta suerte de "superioridad" atribuida a los niños índigo es nociva para el desarrollo de los infantes hiperactivos, cuya necesidad más urgente es la de aprender a convivir con los demás, así como obtener atención y apoyo parentales y de su entorno. A esta variante de las supuestas propiedades de los niños índigo, algunos llegan a asimilarle supuestos componentes segregacionistas o discriminatorios.
Fuente: wikipedia
Nuevos Seres de Luz están poblando la Tierra con un alto potencial intelectual y una nueva conciencia interna. Estos niños vienen con la misión de romper los antiguos esquemas sociales que atan a la humanidad para lograr mediante la transformación de la humanidad abolir la infelicidad en la Tierra.
Desgraciadamente, este tema aunque no es nuevo, permanece todavía oculto ante los ojos de la generalidad de la gente. Nosotros creemos que es necesario conocer la esencia de estos niños, para estar a la altura de las circunstancias y no obstaculizar su proceso de evolución y el cumplimiento de su misión. Como padres, guías y maestros, podemos colaborar en esta bellísima labor.
Al tratar con niños de una nueva conciencia, los adultos nos veremos obligados a cambiar los antiguos patrones educacionales para darles a nuestros niños la libertad de expresión y de acción que mueve su alma, su esencia y su corazón.
Nuevos Niños, Nuevos Hombres
Una nueva raza humana, más sensible y democrática, menos autoritaria y manipuladora, ya comienza a poblar el Planeta. Se trata de seres especiales aunque tan terrenales como sus padres. Solo que, a diferencia de estos, traen consigo la tarea de propulsar cambios en la humanidad.
Bautizados como Niños Índigo, estos muchachos tienen la capacidad de ver mas allá de los espectros de la Luz, escuchar todo tipo de sonidos, incluso su propio fluido sanguíneo, y denotan una destacada hipersensibilidad táctil. "Los Niños índigo, como su nombre lo sugiere, no son Niños azules, sino que se les denomina así porque su aura, o campo energético, tiende a reflejarse dentro de los colores añiles, azules, manifestando la utilización de centros energéticos superiores", asegura María Dolores Paoli, especialista en Psicoespiritualidad.
Es por esto que se les adjudican grandes dosis de intuición, que se demuestra en el desarrollo de la telepatía, cualidades para predecir el futuro, y hasta reconocer la presencia de seres etéreos como hadas y duendes a su alrededor. Además, algunos menores llegan al mundo con el don de la sanación.
Pero, por qué vienen al planeta Tierra?
La Psicoespiritualidad es un concepto relativamente nuevo, que se refiere a la psicología transpersonal, donde se unen el conocimiento del Ego con el conocimiento del alma. Y según Paoli, la llegada de estos "nuevos hombres" no es casualidad, sino que tienen una tarea muy específica por delante. "Porque son puentes entre la tercera y cuarta dimensión, y el verdadero cambio lo activan en la familia, en el hogar", señala.
A juicio de la especialista, estos niños llegan al planeta con la misión de aumentar la rata vibratoria, y poseen mejores condiciones biológicas para manejar las impurezas creadas por el hombre, incluso un potencial de cambio en su ADN.
"Científicamente ya tenemos confirmación del cambio que aportan estos chicos, manifestándose en la activación de 4 códigos más en el ADN. Lo normal en los humanos es tener 4 núcleos que, combinados en sets de 3, producen 64 patrones diferentes, llamados códigos. Los humanos tenemos 20 de esos códigos activados que proporcionan toda la información genética. Exceptuando 3 códigos, que son los códigos de arrancar y parar como si fuese una computadora", añade la especialista venezolana.
Hasta ahora la ciencia ha considerado a estos códigos desactivados con programas remotos que hoy en día no necesitamos. Pero aparentemente los niños índigos nacen con un potencial de activación de cuatro códigos más, que se denota en un claro fortalecimiento del sistema inmunológico.
Esto ha quedado demostrado en estudios realizados en la Universidad de California (UCLA). Algunos de estos experimentos han consistido en mezclar células de niños índigos con dosis letales de virus de Sida y con células cancerosas, que no tuvieron efecto alguno en las células de los infantes. "La conclusión es que estos pequeños vienen con un sistema inmunológico fortalecido, manifestando inmunidad a las enfermedades".
Para la especialista, los Niños Índigo (termino reconocido a nivel internacional) nacen en cualquier clase socioeconómica y se caracterizan, básicamente, por poseer un nuevo estado de conciencia.
Sin embargo, destaca Paoli, ciertos rasgos físicos distinguen a los niños azulados del nuevo mundo: "Son más delgados, tienen ojos grandes, ligeramente abultado el lóbulo frontal, por lo general zurdos o ambidiestros. Comen poco, e incluso, algunos son vegetarianos por no soportar la carne", añade.
Y es que, según estima Paoli, en 1999 esta nueva raza ya abarcaba el 80% de la población infantil mundial, por lo general en querubines menores de diez años de edad.
De acuerdo a Paoli, la crianza y los valores que se transmitan a los niños de la actualidad, requiere de parte de padres y especialistas una revisión. Y para ello hay que tomar en cuenta, ante todo, que las criaturas de la Nueva Era no aceptan la imposición ni la autoridad, rechazan la manipulación, la inautenticidad y la deshonestidad. Tampoco aceptan los viejos trucos de la disciplina basados en crear temor y culpa.
"A estos pequeños seres les gusta ser tratados y honrados como individuos" apunta Paoli en su Material de Apoyo para la Educación de los Niños del Futuro. Por ello la especialista considera que la crianza emocional debe basarse en la visibilidad y transparencia.
"A los los niños índigo no se les debe avergonzar ni culparlos, mentirles ni gritarles. Por el contrario, hay que preservarles la autoestima. Se les debe brindar la posibilidad de elegir y, al mismo tiempo, evitar la comparación. Deben recibir disciplina sin emoción", agrega la psicóloga.
Otras características importantes para la crianza emocional de los infantes es estimular su excelencia, mas no la competencia entre individuos. Y, además, involucrar el buen humor. Según Paoli, existen palabras claves durante el proceso de enseñanza de los pequeñines, de acuerdo a su edad biológica, basados en las Siete Leyes Espirituales para los Padres. Por ejemplo:
Hasta el primer año de vida: los vocablos esenciales son amor, afecto y atención. "A los bebes hay que tocarlos, abrazarlos, pr
Entre los 5 y 8 años: el niño ya asimila conceptos más abstractos. Por ello hay que manejar los términos dar, compartir, aceptación, verdad y no juzgar. "A ellos les encanta compartir cuando sienten amor. Si se les enseña que para dar tienen que perder algo, entonces no aprenden el verdadero significado de dar. En cuanto a la verdad, deben aprender que va acompañada de un sentimiento agradable y no como antesala a un problema, en caso de ocultarla".
Entre los 8 y 12 años: El niño ahora convertido adolescente, requiere que los padres manejen términos como la experiencia, la responsabilidad y el estar alerta. "Los que aprendieron las lecciones de la crianza espiritual, entonces reflejarán la confianza de sus padres. De lo contrario, se encontrara confuso, cederá a las presiones amistosas y buscará experiencias indiscriminadas".
De acuerdo a Paoli, los colegios y demás centros educativos, deben estar atentos para reconocer la presencia de niños índigos dentro de los salones escolares. A su juicio, estos particulares alumnos no funcionan con los métodos de enseñanza tradicionales. Por el contrario, "aprenden de forma reflexiva y participativa, mas no mediante la memorización. Por ello no extraña que a muchos de estos pequeñines se les califique como niños problemas, ya que se dispersan con gran facilidad durante las clases".
La Misión de un Niño Índigo
Los niños índigo son sanadores por excelencia, ellos tienen la capacidad de drenar, equilibrar y elevar la energía de quién lo rodea. La frecuencia vibratoria de estos niños, permite sanar utilizando solamente su energía. Al principio ellos "no saben" que pueden hacerlo, pero o tienen en conciencia, actúan instintivamente en ello, pudiera ser que tu menciones frente a un niño índigo de dos años de edad que te duele la cabeza, entonces el instintivamente te dice "¿te duele aquí?", dirige su manita a tu cabeza… y en unos segundos tu dolor desaparece. Esta faceta de sanación es una característica sobresaliente en los niños índigo, ya que todos son sanadores, sin excepción.
Un niño índigo viene a elevar la energía del planeta y de sus habitantes, son quienes ayudarán a trascender de nuestra tercera dimensión a la cuarta, para ello tienen que trabajar en el cambio de conciencia de los seres humanos que siguen actuando bajo normas, preceptos y estructuras ya caducas. Esto implica realizar cambios en todo el sistema, en la familia, la educación, las formas de gobierno, los valores, los roles, etc. Todo lo que por caduco estorba tanto para el desarrollo del ser humano, como para el planeta entero.
Esta filosofía o misión puede sonar bonito y hasta poético, pero no es una tarea fácil ni para los niños ni para los padres, que continuamente se verán sometidos al enfrentamiento de su propia realidad, desarrollándose una enorme confusión, sobre todo en la educación de los niños, ya que pocos estarán preparados para esto, solamente los padres de un niño índigo que tengan una conciencia diferente, un cierto grado de evolución, podrán hacerlo bien, ya que podrán comprender al niño, su misión y le ayudarán a llevarla a cabo sin obstaculizar.
¿Es su hijo un Niño Índigo?
Para descubrirlo, hágase estas preguntas:
1. ¿Vino su hijo al mundo con un sentido de realeza y actúa como tal?
2. ¿Tiene un sentimiento de merecer estar aquí y ahora?
3. ¿Tiene un evidente sentido de identidad?
4. ¿Tiene dificultades con la disciplina y la autoridad?
5. ¿Se rehúsa a hacer ciertas cosas que se le ordenan?
6. ¿Es para su hijo una tortura esperar haciendo colas?
7. ¿Se siente frustrado hacia sistemas estructurados y rutinarios que requieren poca creatividad?
8. ¿Encuentra mejores maneras de hacer las cosas que las que les sugieren en la casa o la escuela?
9. ¿Es su hijo un inconformista?
10. ¿Se rehúsa a responder a la manipulación o el manejo mediante el uso de la culpa?
11. ¿Se aburre fácilmente con las tareas que se le asignan?
12. ¿Tiene síntomas de Desorden de Atención o hiperactividad?
13. ¿Muestra capacidad intuitiva?
14. ¿Es particularmente creativo?
15. ¿Demuestra empatía o preocupación por los demás?
16. ¿Desarrollo pensamiento abstracto a muy temprana edad?
17. ¿Es muy inteligente y/o dotado?
18. ¿Ha descubierto su hijo la disposición a soñar despierto?
19. ¿Tiene su hijo una mirada profunda y sabia?
20. ¿Manifiesta pensamientos o conceptos espirituales con naturalidad?
Si Usted ha respondido afirmativamente a por lo menos 10 de estas preguntas, el o ella probablemente sea un Índigo. Si son más de 15 respuestas positivas, casi definitivamente lo es.
Los Niños de Hoy, Niños Índigo y Cristal, ¿Quienes son?
Llegan a la tierra, traen mensajes de conciencia y expansión.
Traen consigo una gran madurez espiritual. Saben a donde van, y hasta algunos tienen destellos del lugar de donde provienen.
Traen enseñanzas, proponen cambios. Tienen una gran misión: recordarnos quienes somos; vienen a despertarnos de los sueños materiales en los cuales nos hemos dormido.
Su impulso espiritual los empuja a hacer, a decir y a actuar.
Son los Niños de Hoy, los Nuevos Niños. Grandes seres espirituales jugando a ser niños.
El amor los impulsa, buscan cambiar la tierra, cambiar al hombre, transformar la realidad.
Quien quiera reconocer a estos niños, simplemente mírelos a los ojos, su transparencia y pureza desnuda el alma de quien los mira. Miran fijo, de forma sabia y madura.
Cuando se está frente a un nuevo niño, la emoción desborda el corazón, dentro se despierta un sensación de reverencia y respeto por él.
Igualmente no siempre sucede esto, muchos adultos están tan inmersos en sus mundos de problemas y preocupaciones, que estos niños pasan desapercibidos. Pero aun así ellos actúan, actúan aun más con esas personas. Si sus miradas no encuentran eco, entonces golpearán sus puertas, y si nadie corre a abrirles, permanecerán presentes hasta que alguien los invite a pasar.
Pero la espera a veces se hace larga, se hace eterna, y comienzan a olvidar lo que han venido a decir.
La alegría y amor de estos niños puede llegar a cambiar el mundo, pero sus auras se están tiñendo y contaminando, necesitan de nosotros… Ahora es tiempo de abrir los ojos.
Vea al niño que está a su lado, y pregúntese qué vendrá a decirle.
Los niños Índigo o la energía Índigo de los niños
El niño y la espiritualidad
Hay muchas teorías que hablan de niños Índigo y Cristal.
Nos podemos preguntar: ¿Quienes son los niños índigo?, ¿Y quienes los niños Cristal?
O bien podemos preguntar: ¿Qué es la energía índigo? ¿Y qué es la energía Cristal?
Prefiero enfocar el tema desde el punto de vista de la energía más que el de los niños, porque de esta manera lo despersonifico, y podré hablar no sólo de los niños, sino también de adultos.
En la tierra hay almas de todos los niveles evolutivos, razón por la cual existen diferencias abismales en intereses, gustos, afinidades entre una persona y otra.
Cuando digo “Índigo y Cristal”, hablo de las energías que traen los seres nuevos, y cuando digo “nuevos”, no me refiero a la edad, sino a las almas nuevas que están hoy en la tierra.
Por lo tanto estos términos no solo nos hablan de los niños, sino de todas aquellas personas, sin importar la edad, que han venido con un propósito bien definido, y la energía que traen los ayudará a llevarlo a cabo.
Son seres con una energía diferente a la de otros, ni mejor ni peor, solo diferente, porque todos los seres son igual de importantes y necesarios, si cada uno cumple con su parte y no se olvida a qué vino.
Estos seres nuevos, están en este mundo pero muchas veces se sienten ajenos a él, sienten una gran melancolía porque saben que hay algo más y no saben como alcanzarlo. Son seres que se angustian al ver el mundo como está, y buscan las posibilidades de cambiarlo.
La energía Índigo
Muchos seres que hoy están en la tierra tienen esta energía.
Es una energía rebelde, cuestionadora de las masas, rompedora de estructuras familiares, culturales, religiosas.
Son seres que no se adaptan a modelos preestablecidos, sufren cuando se los quiere encasillar en alguno, y la forma que encuentran para defenderse de ellos, es a través de la rebeldía.
Estos seres quieren diferenciarse, luchan por no ser iguales a todos.
Están despiertos, muchos concientemente, es decir saben lo que quieren, a donde van y qué quieren lograr. Aceptan las elecciones de los demás aunque no estén de acuerdo con ellas, pero están firmes en su propósito.
Otros, están despiertos también, pero no son concientes de la energía que traen, y muchas veces la desperdician queriendo cambiar a los demás o a los lugares en donde se encuentran. Desperdician su energía y potencial, intentando cambiar la vida de los otros forzadamente.
¿Como reconocer a un adulto con energía índigo?
Es muy simple, no estará quieto ante una injusticia.
En su trabajo, por ejemplo, no se dejará sobrepasar por sus “superiores”, defenderá su postura si la cree justa para él y para los otros.
No se dejará engañar, no mentirá, y si lo hizo por alguna inconciencia del momento, no se lo perdonará fácilmente y buscará remediar el error.
Son seres leales. Idealistas y defensores del bien común.
La energía Índigo es muy necesaria en el mundo en que estamos viviendo, pero a veces, estos seres se identifican tanto con el “soy rebelde y peleador”, que no logran encontrar otros caminos para solucionar los problemas que se les presentan.
Tiene que lograr encontrar el equilibrio, y actuar con la energía justa para cada situación, no siempre con la misma. Y a la vez, deben aprender a usar otras herramientas, otros dones que traen a desarrollar.
Si solo actúan por el impulso de identificarse con el “soy rebelde y peleador”, no dejará de ser un personaje más de tantos otros que los humanos se arman, por temor a mostrarse tal cual son.
La energía índigo, como dije anteriormente, es necesaria muchas veces, pero no siempre.
El mundo está pidiendo otra cosa, pide equilibrio, pide la rebeldía solo cuando es necesaria, y la humildad para poder encontrarse con el otro, corazón a corazón, alma a alma, sin personajes de por medio.
Se necesita paz, no guerra. Se necesita amor, no conflictos.
Entonces esta energía puede ser justiciera, pero amorosa.
Un ser índigo puede tener un guerrero dentro, pero un guerrero espiritual, no un guerrero del ego.
Si usted se siente identificado con estás características, obsérvese en su día a día. Vea cuando actúa impulsivamente sin detenerse sentir la sabiduría de su alma.
Sea una persona auténtica. Defienda lo que siente pero sin desestabilizarse, sin perder su centro de equilibrio.
No entregue toda su energía, solo lo justo que requiera la situación.
Los niños Índigo o la energía Índigo de los niños
Un niño con esta energía, exigirá a sus educadores, maestros o padres, no ser visto como uno más del montón; exigirá formas dinámicas de aprender. Querrá todas las respuestas, y no solo esto, querrá escuchar la verdad siempre.
Estos niños son muy exigentes consigo mismos y con el entorno.
Cuentan con un exceso de energía que hace que a menudo no encuentren los mejores medios para exigir lo que merecen. Cuando se encuentran inconformes con lo que les ofrecen, fácilmente se desvían hacia la rebeldía o agresividad.
No aceptan órdenes impuestas, y cuando se encuentran ante personas autoritarias, se muestran desinteresados y cuestionadores. No aceptarán un “No porque no”.
Quien quiera llegar verdaderamente al alma de estos niños, deberá “ganarse” ese privilegio. No es simple conquistar su amor, ni calmarlo fácilmente. Deberán escucharlo, verlo, comprenderlo sinceramente, y ahí lo conocerán. Él se entregará al adulto, cuando el adulto se entregue a él.
Estos niños no querrán ser tomados como chiquillos que nada entienden y que nada saben, querrán una relación simétrica, donde todos se respeten desde el lugar en donde están.
Querrán jugar, y aprender jugando.
Defenderán a otros niños de apariencia “más débil” que ellos.
Se quedarán con menos, con tal de dar a los demás.
Estos nuevos seres disfrutan plenamente la naturaleza, poseen una conexión y percepción de ella que nadie les enseñó o pudo enseñar.
Sensibles, pero no débiles, porque la energía que traen los ayudará a enfrentarse al mundo.
Amorosos, concretos, y a veces, muy terrenales.
MÁS INFORMACIÓN
Este contenido corresponde a un extracto del Curso a Distancia “Los Niños de Hoy” .
http://www.caminosalser.com/
Niños cristal
En 1997, Steve Rother postuló en su libro Recuerda, la existencia de una nueva energía identificada con los llamados “niños cristal”. Con la publicación de su obra en el 2002 comenzó a difundirse esta idea: se trata de una energía vibratoria diferente a la de los “niños índigo”. Mientras que los índigo sería preparadores y detonantes, los cristal serían lo que sembrarían una nueva forma de realidad.
Mientras que los índigo, mucho más radicales, no pueden cambiar las estructuras retrógradas de la sociedad, los cristal son pacificadores natos que buscarán el equilibrio entre lo intuitivo y lo racional, buscando una plena y profunda armonía.
Se dice que algunos “índigos” han evolucionado hacia la condición “cristal” a través de una progresiva transformación del carácter. Esta modificación obedece a una adaptación serena que no genera crisis dolorosa alguna. Supone un paso desde la polaridad a la unidad y desde lo individual a lo grupal.
La frecuencia índigo se encuentra en el chakra Ajña . Esta cualidad les permite percibir lo que otros esconden, lo que puede cambiarse o evitarse, pero lo expresan de forma tan visceral que con frecuencia resulta cruel. Diferente es pues la frecuencia cristal, que ubicada en el chakra Anahatha, cerca de las más profundas emociones vinculadas al plexo cardíaco, poseen claramente desarrollado el don de la empatía a la hora de comunicar su misión. Cuidan pues, tanto los sentimientos propios como los ajenos.
Características de los niños Cristal
Perciben con facilidad el temor en su entorno inmediato
Pueden amplificar su propio temor y proyectarlo en el entorno
Evitan invocar el miedo
Poseen un bajo perfil, son discretos y sumisos
Son positivos y serenos
Sólo piden lo necesario para sí mismos pero no dudan en exigir para los demás
Evitan el conflicto y la confrontación
Hablan poco, pero con mucha profundidad.
Poseen habilidades psíquicas
Poseen una gran capacidad afectiva
Les agrada pasar mucho tiempo solos
¿Cómo reconocer a un adulto con energía cristal?
Soñadores, sensibles, con el corazón abierto al mundo.
Leales y sinceros.
Saben lo que quieren, pero les cuesta encontrarlo en este mundo.
Hablan del amor, pero pocos los comprenden.
A veces se sienten solos, porque no encuentran la pareja, los amigos o familiares con quien compartir lo que traen.
Muchas veces no son comprendidos, son tomados como personas indefensas y de baja autoestima. Pero sí saben quienes son, y saben defenderse, pero no como lo hace la mayoría. No pueden pelearse, y menos físicamente, no tienen esa energía. Saben internamente, conciente o inconcientemente, que al lastimar a otros se lastiman a ellos mismos.
A la energía cristal le cuesta encontrar espacio en el mundo.
No encajan en los empleos tradicionales, ni en la universidad. Deben buscar nuevas posibilidades, de lo contrario se apagan, se deprimen, les cuesta vivir.
Sin embargo es necesario recordarles que no se han equivocado en venir; la humanidad se ha equivocado, se ha cegado y muchos han perdido la brújula para volver a casa.
El mundo necesita de estos seres. El mundo necesita su amor y su mensaje.
Poco a poco los nuevos espacios se abren para la energía cristal. Cada vez son más en la tierra y comienzan a unirse.
No deben callar lo que tienen para decir, no deben bajar sus brazos, ni venderse al mundo.
Deben continuar defendiendo el amor, y principalmente CONFIAR EN ELLOS. El universo los trajo y los protegerá, NO ESTÁN SOLOS.
Pero hay que escucharlos, porque no gritarán, ni tampoco obligaran a nadie a que los escuchen.
Son humildes de corazón y puros de alma.
Los seres con energía cristal, son un complemento para la energía índigo. Cuando los índigos abren caminos, los cristales ponen las semillas que darán frutos de amor.
Cada uno cumple con su propósito.
Los niños cristal o la energía cristal de los niños
Intensamente sensibles.
No soportan presenciar o ver peleas, injusticias o malos tratos.
A menudo parecen tímidos y callados, pero cuando hablan, saben lo que tienen para decir.
En la escuela muchas veces, lamentablemente son maltratados por los niños con otra energía, pero siempre habrá un índigo para defenderlos.
Son niños profundamente espirituales, y encuentran en el arte el alimento espiritual que necesitan para equilibrarse. Es por ello que la mayoría de estos niños tienen un gran potencial artístico a desarrollar, que bien estimulado servirá como canal de expresión de su alma.
El arte les da vitalidad, ánimo y energía. La música, la pintura, la danza, son su canal para hablar de ellos.
Les cuesta adaptarse a las escuelas tradicionales, sobre todo si estas no estimulan el potencial artístico que traen.
Son curiosos, amorosos e inteligentes.
Tanto Índigos como Cristales suelen percibir los estados anímicos y pensamientos de las personas. Además absorben fácilmente las energías de su entorno, por lo cual hay que ser cuidadosos y responsables ante ellos.
Niños Arcoiris
Existen varios seres de luz que empezaron a llegar a la tierra desde hace bastante tiempo, primero llegaron los niños índigo, los guerreros del amor y después llega una ola fuerte de niños Cristal, quienes vienen a imponer su amor ante los seres humanos brindando tranquilidad y paz.
¿Quienes son entonces los niños Arcoiris?
•Son niños que vienen después de la generación de niños índigo y cristal.
•son seres de luz que no tienen karma y nunca antes habían estado en la tierra.
•Son llamados así porque su energía transmite los colores del Arcoiris.
•Tienen el don de la sensibilidad, sanación y son psíquicos.
•Además se caracterizan por ayudar e imponer el amor incondicional en el planeta.
•Los niños Arcoiris, tienen la capacidad de transformar toda la energía que los rodea en amor puro.
•Inspiran amor, tranquilidad, paz, sabiduría.
•Ellos tienen la misión de cambiar el mundo, transformarlo por medio de la sanación y el crecimiento del amor en los seres humanos.
Recuerda que La meditación es una excelente estrategia para balancear a los Niños. Este excelente método hace que los niños logren manejar sus emociones, creciendo su autoestima y por lo tanto son más felices.
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